Amigo de charlas - antes de entrar al trabajo. Dios quiso que pusieras tu bar al lado del I.U.N.A., con el tiempo, compartir proyectos, cenas, muchos vinitos tintos y cagarnos de risa en continuos encuentros, en tu casa o en la nuestra.
Siempre dispuesto a ayudarnos en nuestras locuras artísticas.
Hace unos días, cuando te vimos en el hospital donde estabas internado, viendo en la television a Daniel Barenboim, dijiste:- Cuando salga de acá me voy a comprar un piano!.
Nadie te contradijo, ya no nos sorprende tu locura!
Chau negrito!
No tenes ni idea cuanto te vamos a extrañar?.
Este piano alado para vos ( obra de Esther Ferrer)
2 comentarios:
De verdad un amigo!
Brindamos infinitas veces con él.
Brindaremos infinitas veces más por él.
Seguro debe estar haciendo "chilenitas en el aire".
Jamás voy a dejar de extrañarlo.
No sabía que el negro se fué, pero que suerte que se llevo un piano alado!
Hasta la vista!!!!!
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